PAPELTERAPIA. 10 beneficios de escribir un diario.

El post de hoy es posiblemente uno de los más terapéuticos porque no hay un ejercicio más efectivo y en el que se noten más los beneficios de la papelterapia que escribir un diario. No sé si alguna de vosotras lo ha hecho antes, yo lo vengo haciendo de manera instintiva desde pequeña. Escribir un diario siempre ha sido una necesidad para mí, una manera de dejar salir cosas que llevaba dentro, de organizar mis ideas, de SACAR, a veces bueno, a veces malo, depende del día… Aún lo sigo haciendo y me hace sentir genial. Por eso hoy os traigo un post con 10 beneficios de escribir un diario.

Antes de empezar…

¿Qué necesito?

Ni más ni menos que papel y bolígrafo. Un cuaderno bonito del formato que más se adapte a tus necesidades, o incluso unos folios sueltos. Tú marcas los días que escribirás y el tiempo que vas a escribir, según lo que necesites.

¿Y sobre qué y cuándo escribir?

Hay dos tipos de diarios:

1. El diario como cuaderno de bitácora, en el que escribes cada día y dejas un registro escrito de cómo te ha ido el día. Puedes concentrarte en algo en concreto, con tu pareja, con tu trabajo, en un viaje… o hablar de todo un poco. Si te decides por esta modalidad te recomiendo que lo hagas siempre a la misma hora del día. Así se convertirá en una parte de tu rutina diaria.

2. El diario como ejercicio autoterapéutico. El diario terapéutico es como una sesión con un psicólogo o un coach ¡pero GRATIS! Se trata de escribir sobre temas que te preocupen, sobre cosas que necesites poner en orden, entender, soltar o expresar. En este caso escribes cuando lo necesites, según el momento en el que estés. Hay meses que lo puedes necesitar más a menudo y otros que no. Tú marcas el ritmo y la duración de cada sesión.

En cualquier caso, escribe sobre lo que tú quieras, lo que te fluya, lo que necesites. En este momento yo escribo dos diarios, uno es el Diario de 5 años, me lleva unos 3 minutos al día y en él escribo sobre mi proyecto, sobre Charuca. Lo que más me gusta de este ejercicio es ver cómo va creciendo la marca, y cómo voy creciendo con ella. Después tengo otro diario que escribo con menos periodicidad y lo utilizo cuando necesito escribir. Éste no lo escribo cada día, solo cuando me fluye. Es como mi visita a mi terapeuta personal, a mi oráculo, a mí misma.

Ahora sí, vamos con los beneficios de escribir un diario:

1. Es la terapia para soltar peso, para sacar carga de la mochila, más barata que existe y tiene efectos parecidos a hacer una terapia acompañada. Sólo necesitas papel y bolígrafo o pluma, un momento para estar contigo misma y un entorno relajante donde te sientas segura.

2. Ejercitarás la presencia, el aquí y el ahora. De hecho, aunque podrías hacerlo de manera digital, es mucho mejor que escribas en papel para entrar en contacto con las sensaciones, el tacto del papel, el peso del bolígrafo, la manera en la que la tinta se desliza sobre la página. Si te gustan los olores agradables, es un buen momento para encender una vela y también para acompañar la experiencia con una taza de té o de algo que te guste. Es tu momento de disfrute.

3. Es una manera de practicar algo que se está perdiendo, la escritura manual.

4. Te ayuda a poner tus ideas en orden. Si necesitas tomar una decisión pero de manera consciente te cuesta aclararte, escribe y comprueba lo que pasa. Es posible que al principio te cueste dar con las respuestas pero sigue escribiendo, profundiza, entra dentro de ti y verás cómo escribir tu diario te ayudará a conocerte mejor, a entender tus prioridades.

5. Además de barato es un ejercicio muy flexible, una papelterapia que se adapta totalmente a tu agenda. Lo puedes practicar con la asiduidad que necesites, ya sea una vez al día, a la semana o al mes. Como en todo, te recomiendo que seas constante, no desde la autoimposición sino desde el disfrute. Si no lo disfrutas, si no lo vives como un momento agradable, es mejor no hacerlo.

6. Escribir un diario te ayuda a conectar con tu subconsciente, donde está tu verdadero ser. Esto es posible que no lo consigas en la primera sesión, pero si eres lo suficientemente constante, descubrirás cómo escribiendo tu diario llegan respuestas con las que no puedes conectar pensando, de hecho, escribir un diario no tiene nada que ver con pensar, sino con fluir. ¿Cómo sabrás que has conectado? Cuando salgan respuestas y párrafos que te sorprendan.

7. Precisamente, porque ejercitas el fluir, es una práctica que ayuda a aumentar la creatividad. ¿Por qué los niños son tan creativos? Porque no piensa, sienten, hacen. Puedes ver un post acerca de la escritura y la creatividad aquí.

8. Es tu espacio de libertad, donde puedes permitirte ser tú misma, decir lo que te dé la real gana, ser un 1000% honesta. Y no necesitas decírselo a nadie, solo a ti misma. De hecho, no todos los diarios son para volver a leerlos. Escribe con toda la libertad del mundo, como si nadie fuera a leerte, ni siquiera tú misma.

9. A la vez que te ayuda cada día como terapia, estas creando un recuerdo muy valioso, una foto emocional de cómo estás en una época de tu vida. Es muy bonito volver a tu viejo diario y comprobar cómo has evolucionado, cómo has crecido o a veces descubrir con sorpresa que esa persona que eras hace 10 años es muy parecida a la que eres ahora.

10. Ayuda a desbloquear emociones, a hacer limpieza, y eso hace que escribir un diario refuerce tu salud y tu autoestima. Puedes leer más sobre las capacidades terapéuticas de escribir un diario en este artículo.

¿No está mal, no? ¿Te han dado ganas de probar o de volver a escribir un diario? Ojalá lo hagas, estoy convencida de que todas podemos vivir un poco más ligeras de equipaje. Hasta aquí mi post de hoy, si te ha gustado y quieres leer más reflexiones como ésta, únete a mi News Club, apuntándote a mi lista de correos y te enviaré un email cada vez que haya novedades en Charuca, además recibirás el #charucaletter, un email semanal lleno de inspiración y energía positiva.

  • María Angeles Fernández
    11 enero 2017

    Me encanta toooodo lo que escribes. ¡Eres una motivadora nata!
    Cuando tenía unos 10 años, empecé a escribir un diario que me duró casi hasta la adolescencia. Cada vez que lo leo, me engancho; como si fuera el mejor libro del mundo…
    Lo cierto es que por el miedo a que me leyeran, empecé a escribir mis pensamientos en hojas sueltas, en libretas sin importancia. Cada vez que encuentro una de esas páginas, vuelvo a emocionarme.
    Tal vez sea el momento de volver a empezar a escribir un diario. Y sería genial hacerlo en uno de tus cuadernos o libretas, ¡que me enamoran!
    Beso.

  • Marisa Magenta
    12 enero 2017

    He recibido hoy mi diario! la otra vez volaron de la tienda y no me pude quedar con uno!
    ya tengo controlado mi momento del día para escribirlo, y estoy deseando empezar!!
    gracias por tanta terapia!

    muakaaaaaa

  • Covadonga
    27 abril 2017

    Yo tengo una gran pena en el corazón. Empecé a escribir con 9 años, allá por 1998, en 2011, se inundó mi casa y pedí la gran mayoria de mis diarios, a dia de hoy solo tengo los del 2011 hasta hoy, y me duele mucho cada vez que me acuerdo, por que ahí tenia casi una vida escrita…

  • Esdras camacho cuevas
    29 diciembre 2017

    Yo llevo mas de 13 XIII años escribiendo el diario empenze desde el año 2005 ala Edad de 12 XII años y actualmente llevo 13 XIII años y Temporadas y mas de 644 Episodios y 11 XI Episodios Especiales del Diario y para mi fue lo mejor que pude hacer en la vida y aun tengo mucho por escribir hasta la Temporada 16 XVI y El Episodio Decimoséptimo especial del Diario XVII 17

  • 11 enero 2018

    De pequeña también escribia un diario, de hecho me acuerdo que era el diario que me regalaron en mi comunión. Estuve años escribiendo y me iba genial, hasta que llego la etapa de la adolescencia y mi madre leyó mi diario. A raiz de ahi seguí escribiendo pero ya no era capaz de soltarme, de hecho hasta le ponía notas a ella para si volvía a leerlo. Y diréis pero no lo escondias?, si si lo escondia pero parece ser que mi madre tenia un radar y por muy escondido que estuviera, sabía que estaba dentro de las cuatro paredes de mi cuarto y al final daba con el.
    Gracias Charo porque me has dado el impulso para volver a retomar mi diario, el de la comunión noo!!! Uno nuevo claro y que ponga Charuca

    • Vanessa
      11 enero 2018

      Qué rabia da eso!! yo también tuve un diario de niña hasta que me lo leyó mi padre. Nunca jamás he vuelto a escribir uno, se te quitan las ganas…Yo ahora que soy madre espero no caer jamás en ese error. Creo que es muy necesario respetar la intimidad de cada uno, incluso la de nuestros hijos. Pero eso es otro tema que sería para debatir aparte.
      Muy buenos consejos una vez más charuca. Gracias por compartirlos.

      • 12 enero 2018

        Totalmente, habría que hacer un llamamiento a madres y padres para que nunca, never, jamás, lean los diarios de sus hijos 😉
        Gracias por leer, guapa!

    • 12 enero 2018

      Uf… imagino que debió ser un palo. A mí tampoco me gustaría nada que me leyeran el diario. Ojalá te atrevas a retomarlo, porque es muy gratificante.

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